Un guionista intenta adaptar el libro de una escritora sobre un hombre que clona orquideas. La película relata sus esfuerzos intercalados con la historia del libro.
El compositor abarca en su partitura lo abstracto y lo emocional, con un implícito sentido de fatalidad anunciada, pero con tono melancólico, lo que ayuda a dar al film un cariz desesperanzado, pero sin excesos dramáticos. Basa su obra en el poder sugestivo de dos temas que representan el esfuerzo y la consecución del protagonista por llevar a buen término su creación, y un tercero más romántico, pero que goza de un cuidado y sobrio cariz patético.