Una estudiante universitaria participa en un concurso hípico mexicano para evadirse temporalmente de sus problemas. Pronto descubre que sus problemas de salud van a impedirle dedicarse a su pasión.
El compositor firma una banda sonora dramática y sentimental que, aunque algo edulcorada, tiene temas y momentos bonitos y emotivos. Está hecha más para gustar que para explicar, recorre territorios muy comunes y si bien no es especialmente interesante en su arco dramático ni en su estructura, se destaca por la elegancia de sus melodías.