A Pee-Wee le roban su bicicleta -que es lo que más quiere en su vida- y va tras su busca a lo largo de Estados Unidos.
Divertida y variada creación en la que el compositor despuntó algunas de las constantes que luego caracterizarían su obra en el cine: temas dinámicos, bufonescos, ritmo trepidante y golpes de efecto hábiles. Aquí se mostró deliberadamente anárquico, pero serio, en cierto modo para contrastar los propios desfases de la película. Se acompaña de Back to School (86).