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A menudo se escucha decir de la música en el cine que está supeditada a la película, que su rol es de apoyo, servicio o sumisión al filme. Formalmente es y debe ser así, pero no solo sucede con la música sino con todos los demás elementos que construyen la película: la fotografía, montaje, intérpretes, sonido, vestuario, decoración o los efectos especiales también están supeditados a la película y sus roles son de apoyo, servicio o sumisión al filme, puesto que la película es el destino y todo lo que se emplea para que exista el medio para lograrlo.
¿Pero es la música sumisa a la historia, guion, intérpretes, montaje o cualquiera de esos demás elementos con los que se construye la película? Hay un término anglosajón que relega la música a una posición secundaria: Background music, lo que en castellano vendría a ser música de fondo. Es una definición que no se corresponde con la realidad puesto que en numerosas ocasiones la música se posiciona al frente: Foreground music (o música en primer plano) término que poco comprensiblemente es rarísimamente empleado cuando es tan frecuente. Sobre este particular me remito a los artículos Background/Foreground, ¿Oír o escuchar? y La competición sonora.
La música en el cine puede asumir tres roles, no necesariamente de modo absoluto:
La música está para dar apoyo, realce o énfasis a un elemento superior más importante: por ejemplo la que se aplica en una escena de acción para dar intensidad a la persecución de coches. El foco de atención (salvo que la música incluya narración) es la persecución de coches, y en esa secuencia lo visual, el montaje y hasta probablemente los efectos sonoros asumen un rol prioritario. O por ejemplo la música (no narrativa) que se aplica en escenas de diálogos, etc. Sin la música las escenas serían menos vistosas, emocionantes o emotivas pero lo que muestran seguiría siendo sustancialmente lo mismo. De ninguna manera este posicionamiento la convierte per se en música irrelevante o innecesaria, simplemente que su función es de apoyo a elementos más protagonistas.
La música está para sumarse a otro/s elemento/s y complementarlo/s, construyéndolo/s conjuntamente: por ejemplo la música de un personaje o la que se aplica en un escenario para explicarlo. Sin la música el personaje quedaría inexplicado (no se muestran sus pensamientos o sentimientos) y el paisaje bonito al que se priva de la música triste dejaría de anunciar algo grave y sería solo un paisaje bonito, vacío de contenido dramático o argumental. Hay cooperación para crear personajes en A Passage to India (84) o en Braveheart (95), o para sumarse a lo que se ve en The Mission (86) o Jurassic Park (93), en el aporte emocional de la famosa escena de entrenamiento en Rocky (76) y en un larguísimo etcétera.
La música toma el control sobre otro/s elemento/s y lo/s determina, sometiéndolo/s y siendo la que marca las pautas dramáticas y/o narrativas, de modo que quede meridianamente claro que no hay cooperación sino dominio. Sucede en aquellas ocasiones en las que se da a la música un rol de liderazgo frente a los demás elementos: en Jaws (75) o The Omen (76) cuando el escualo y Satán respectivamente se presencian no física sino musicalmente, por ejemplo. También hay escenas con esas caracterísicas en Up (09) -el vuelo de la casa-, en los finales de Taxi Driver (76) y The Ghost Writer (10) y en Vertigo (58) la casi totalidad de la música se impone por encima de los demás elementos.
En las películas citadas como ejemplos encontraremos músicas en los tres roles. No son roles absolutos: una película puede tener la música en las tres posiciones e incluso un tema musical cambiar de rol durante el metraje.
Es evidente en todo caso que la música, en cualquiera de los roles que se le asigne, colabora con el resto de los elementos, por lo que hemos de entender que estos tres roles se refieren a lo que acontece en ese contexto de colaboración. Pero siendo así no tiene sentido englobar la música de cine en el rol de sumisión a, sino siempre en el de colaboración con. Es una diferencia notable que ayuda a comprender más y mejor para qué sirve su uso en el cine.
