En un futuro distópico todas las vidas de sus habitantes son 100% transparentes y, por tanto, fáciles de rastrear por las autoridades. Es el fin del crimen, o eso parece. Sin embargo, un detective se encuentra con una joven sin huellas digitales y completamente invisible para la policía...
El compositor recrea solventemente el entorno futurista, distópico y deshumanizado con música electrónica variada en temas. Añade elementos melódicos cálidos que sirven para incorporar el factor humano, moderadamente desolador. Es sencilla y eficiente, con buen tema principal.