En un pequeño pueblo australiano, una pareja vive feliz con sus cuatro hijos. Pero la muerte brutal del marido deja a la familia totalmente devastada y la pequeña Simone, de ocho años, rechaza el duelo y prefiere trepar a la inmensa higuera que ocupa el jardín. Allí pasa horas y horas con su padre…
Partitura intimista de bellas y austeras melodías aplicadas para realzar un tono evocador muy calmado y apacible, con destacado empleo del cello y el piano, instrumentos que le sirven además para pincelar el filme de un color muy agradable y emotivo.