Videojuego de aventuras y exploración ambientado en los años 30 en una isla paradisíaca del Pacífico Sur en la que la protagonista tendrá que desentrañar una
serie de misterios sobre una expedición perdida en la que iba su marido.
Reseña de Ignacio Marqués Cuadra:
Muy estimable banda sonora orquestal en la que el compositor aplica una música ambiental y dramática tanto para reforzar determinados aspectos atmosféricos o emocionales del juego como también enfatizar muchos de los eventos que hacen avanzar la aventura —ya que gran parte de ella transcurre sin música, destacando así el sonido ambiente de los propios escenarios durante la exploración y superación de puzzles—. Es una música bella y bien hecha que funciona muy eficientemente a nivel inmersivo pues consigue recrear con solvencia la aventura, el misterio, lo sobrenatural o la fascinación por el entorno, además de aportar cierta profundidad dramática en algunos momentos de la historia. Consta de un destacado tema principal que va cambiando según avanza la aventura, y de dos temas centrales musicalmente interrelacionados —uno para la protagonista y otro para el marido— que, en su aplicación, resultan algo dispersos a nivel narrativo debido a la dificultad de que el jugador pueda asociarlos conceptualmente a ambos personajes; también al abundante uso de otros muchos temas e ideas musicales que, aunque necesarios algunos de ellos, acaban restando espacio a los que son más importantes. Pese a ello, es una banda sonora que en muchos momentos logra potenciar la experiencia y aporta numerosos elementos interesantes al videojuego.