Un joven obrero gana un billete para viajar a Southampton a ver la partida del Titanic. Allí conoce a una de las camareras del Trasantlántico y pasa la noche con ella. Con el hundimiento de la nave y el nacimiento de la leyenda, el joven saca partido y cuenta su encuentro con la camarera.
Partitura de corte romántico y nostálgico que busca dotar al metraje de una permanente sensación de tristeza y aflicción, que ayuda especialmente en todo lo que concierne a la recreación de un amor vivido y no olvidado.