Tras la desaparición de su madre dos niños son enviados a vivir con su abuela a la ciudad. Cuando deciden volver a su casa junto al mar, su viaje se convierte en una carrera contra el tiempo a medida que se internan en un mundo que sólo conocen a través de las leyendas que le narraba su madre.
El compositor aplica una banda sonora refinada y en muchos momentos exquisita, con voces y canciones e importante presencia de la música celta para recrear un entorno de magia y fantasía. Es una creación variada en temas y estructurada en derredor de un bello tema principal que sirve de referencia, al que aplica desarrollo narrativo. En momentos apacible y en otros moderadamente quebrada y dramática, es una banda sonora sólida estéticamente, fluida, marítima y muy elegante e hipnótica.