A comienzos del Siglo XVI, tras la muerte de Isabel la Católica, comienzan tiempos de incertidumbre en los que se viven luchas de poder entre Fernando el Católico y Felipe el Hermoso, cuya principal víctima fue Juana, hija de Isabel y legítima heredera al trono de Castilla, conocida como Juana la loca.
El compositor sigue la línea musical de la serie televisiva Carlos, rey emperador (15), con poderío melódico y dramático, presencia de coros y un delicado tema para la reina.