Tercera entrega de la saga Creed (15), que se centra en el hijo de Apollo Creed, Adonis, quién está prosperando en su carrera y en su vida familiar. Cuando un amigo de la infancia y antiguo prodigio del boxeo reaparece tras cumplir condena en la cárcel, está ansioso por demostrar que merece su oportunidad en el ring.
Reseña de Javier Blanco:
El encargado de continuar musicalmente la saga, Joseph Shirley, toma el testigo de su mentor, Ludwig Göransson. Lo primero que llama la atención es que gran parte de los temas de la saga ya presentados están ausentes, y es especialmente notable la casi total ausencia de temas de Bill Conti, excepto por una mención especial cerca del final. Esto tiene sentido pues Rocky ya no es parte de esta película, y por lo tanto sus temas ya no tienen cabida en esta entrega. Algo similar sucede con el tema central para el personaje de Creed, que también está ausente durante casi toda la película: el personaje se ha retirado del boxeo y por lo tanto la historia no da pie a que el tema entre en escena, dejando espacio a otras ideas como un bello tema que crea para la relación entre Adonis y Bianca y su hija Amara. El tema solo vuelve a hacer acto de presencia en el momento en el que Adonis decide que tiene que ser él mismo el que le pare los pies a Damian Anderson, y se pone a entrenar de nuevo para el combate. Aquí el tema vuelve a la acción con la fuerza y energía que tenía en anteriores entregas, y el compositor demuestra la inteligencia detrás de este planteamiento, pues es un tema que claramente representa la conexión del personaje con el boxeo.
Hay además un par de motivos centrales nuevos, uno de ellos oscuro e imponente para Dame, y otro más heroico y emotivo que acompaña el viaje de Adonis para defender el título de campeón. Ambos temas se confrontan, con el compositor apoyándose tanto en sonoridades electrónicas como orquestales, con una importante presencia de voces y coros, reforzando así el conflicto y la relación entre ambos personajes de manera directa y emocional. Es en su conjunto una banda sonora contenida, en un segundo plano, para reforzar el impacto en la audiencia de los momentos de más importancia y emoción.