La odisea de Lord Kitchener por recuperar para Inglaterra los territorios del Sudan, a finales del XIX.
Partitura que sirve a los propósitos de la gran aventura, pero que contiene en su seno una vena intimista muy destacada, para reflejar la soledad y el afán del protagonista. Hay cierta influencia impresionista francesa en la música. Se incluye, junto con otras bandas sonoras, en el recopilatorio Spellbound: The Classic Film Scores of Miklós Rózsa (87).