Siendo crías, dos tigres son separados de sus padres, criados en cautividad y, años después, reunidos por un explorador que, sin quererlo, los enfrenta entre sí.
El compositor aplica, en esta bella creación, música sinfónica occidental en combinación con temas instrumentales étnicos, del sudeste asiático, todo con propósitos ambientales. Incluye temas de acción, muy intensos, para las escenas de combate entre los animales.