Segunda parte de Marius (31), en la que la joven enamorada del marinero, embarazada, se casa con un viejo viudo para contentar a su padre.
Aunque con distintos compositores, las dos primeras partes de esta trilogía se unieron con un mismo tipo de música, enfática, romántica y ambiental, destacada por su tono afrancesado y, aquí, más dramático. Se incluye, junto con otras bandas sonoras, en el recopilatorio Marcel Pagnol (96).