Una tripulación de pescadores se adentra en aguas peligrosas cuando sus deudas empiezan a acumularse.
El compositor aplica una creación dramática en su característico tono intimista, evocador, donde hay puntuales momentos para dar énfasis a la acción y otros para el misterio. En su conjunto resulta irregular y poco sólida en su estructura, es demasiado cambiante y apática. Solo en la parte final logra algo de relevancia y adquiere entidad.