Un emigrante polaco acaba por hacerse con el control del turbulento sindicato de transportistas norteamericano, pero debe enfrentarse a la mafia, que es quien lo controla verdaderamente.
Banda sonora dramática, muy solemne en sus melodías, escritas para gran orquesta, que otorgan al filme un cariz enfático y moderadamente grandilocuente, con un tema principal de gran belleza. Se acompaña de Slow Dancing in the Big City (78)