La Inquisición dirige un sangriento reinado de terror, tortura y muerte en nombre de la religión con un cardenal sumido en una red de cruel sensualidad. Atrapada en medio de esta enloquecida brutalidad, la esposa de un humilde panadero es acusada de brujería por Torquemada.
Imponente partitura sinfónica y coral que enfrenta una música poderosa y oscura, amenazante, con otra lírica y dramática, y sobresaliente tema principal.