Estupenda composición de Daniel Hart que, mas que ambiental, lo que transmite es el carácter emocional de sus personajes y del tiempo por el que pasan. La música, cuando trata la relación de sus dos protagonistas, asfixia su separación hasta liberarlo a mitad de film con un tema precioso y significativo, para después dar un peso de "sin retorno" que, no puede ir mas acorde con las imágenes, dando una sensación de fatalidad ante el futuro (¿o no?) de su protagonista principal. También resulta bastante significativa la canción principal, nexo de vital importancia para esta pareja. Una composición intimista, que maneja bastante bien las emociones de los personajes y del destino incierto que les espera, y que se amolda como un guante a las imágenes del film, fusionándose de forma notable. Recomendable tanto película (preciosa y desoladora) como banda sonora.