Godzilla, dotado de un rayo atómico, combate en una lucha a muerte contra un OVNI invasor que amenaza una ciudad japonesa.
El compositor combina música sinfónica con efectos electrónicos y corales, recurriendo frecuentemente al leit-motif de Godzilla, compuesto por Akira Ifukube, para dar un aire de grandilocuencia épica al conjunto y recrear una atmósfera de horror. Los resultados, simpáticos pero más bien simples, evocan mucho las músicas de las películas de ciencia-ficción de la Universal.