Comedia en torno a las complicadas relaciones que se producen entre el hijo del presidente de Estados Unidos y el guardaespaldas que se le asigna para su protección.
Partitura alegre y ligera, que arranca con una marcha en su tema inicial, en el que se incorpora un silbido para enfatizar su componente cómico. Prosigue con temas de acción y otros de aire romántico, de los típicos y habituales en los filmes de la Disney. Todo resulta demasiado obvio y convencional, pero es el propósito perseguido. Lo peor, el empleo de sintetizadores en combinación con orquesta sinfónica.