Filme de animación sobre dos adolescentes vecinos y amigos desde pequeños que, un verano, mientras juegan en su edificio que van a demoler, sucede un fenómeno muy extraño: a su alrededor, solo ven el mar.
Reseña de Gabriel Yong:
Extraordinaria partitura funciona en tres niveles muy presentes: por una parte, músicas que reflejan un lado mucho más lúdico del evento fantástico en que van a estar involucrados los niños, reflejando su amistad y que servirá para salvar a Natsume en la secuencia del rescate; por otra parte, uno de los temas centrales tiene una construcción formidable, representando la infancia y la dicha de Kosuke y Natsume: ambos vivían con el abuelo del muchacho, por ello el tema es radiante en su primera aparición mientras los espacios se llenan de vida con los recuerdos de aquella época feliz para luego pasar al lúgubre presente, dado que el fenómeno fantástico se ha sido generado porque Natsume no desea dejar ir el pasado, por lo que el tema se desgarra en los instrumentos de cuerdas. Por ultimo el tema principal es de belleza desbordante y aunque en primera instancia está de manera discreta, representa al presente pero nunca involucra a Natsume ya que ella está representada por el otro tema hasta la charla durante el rescate. En ese momento el tema se expande, la abarca y poco a poco se va maximizando hasta la belleza plena, pero antes de volver a su hogar ambos chicos deben soltar al otro tema, una para poder avanzar y el otro para honrar a su abuelo, lo que conforma uno de los momentos más bellos de la película. En las secuencias finales comparten el tema principal en su vida diaria, preparados para avanzar al provechoso futuro.