Tercera entrega de Hostel (05), se desarrolla en Las Vegas y tiene como protagonistas a los miembros de una despedida de soltero que se convertirán en víctimas de una auténtica carnicería.
Banda sonora que mantiene en parte la línea estética aplicada en las dos anteriores entregas por Nathan Barr, si bien se trasciende a un nivel más emotivo (de terror) que ambiental, de modo que con una mayor grandilocuencia en la música la acerca a las convenciones del género características. Añade, además de un tono apocalíptico y demencial, también agresivo, una muy contenida aflicción, aunque toda esta creación está ubicada en el territorio de lo hostil.