Basado en los hechos reales sucedidos en Bombay, en 2008, cuando los huéspedes del hotel Taj Mahal Palace fueron atacados por grupo de terroristas paquistaníes.
Para este filme de acción que recrea de modo visceral y crudo los trágicos acontecimientos la música del compositor participa activa y muy eficientemente en generar una atmósfera irrespirable, hostil y tóxica, con el propósito de meter al espectador en el filme y hacerlo sentir parte del drama. En contraste con estas músicas, otras dramáticas y afectadas y una resolución final muy emotiva, con un notable tema principal que eclosiona al terminar la pesadilla.