Una asistenta social tiene que visitar a una familia conformada por una madre, dos hijas y un bebé... de 21 años.
El compositor aplicó una muy solvente banda sonora de género, enraizada en el tipo de música que era habitual en los años setenta, con música sinfónica, algo de pop y melodías cálidas y ligeras. Gira en torno a un calido tema principal que evoca una canción de cuna, que aporta ternura pero que también tiene un trasfondo moderadamente siniestro que se desarrolla a lo largo de la película, con cierta ambigüedad entre el terror puro y el humor negro. Junto al mismo, poderosos temas en esa línea y músicas ambientales.