Un joven adquiere el poder de levitar y un médico ve en ello la oportunidad de ganar dinero.
El compositor aplica una creación que sustancia en música electrónica para recrear un entorno de misterio y de enigma, algo estática, y otra de tono espiritual y místico, que pretende -sin acabar de conseguirlo- elevarse y trascender de la anterior. En su conjunto resulta algo monótona y poco concreta.