Un obispo visita en la cárcel a un amigo de la infancia, condenado a 40 años de prisión. Allí los reclusos le hacen presenciar una escenificación de lo que realmente sucedió tiempo atrás.
Bella y solemne creación de tono religioso, con coros masculinos y soprano, que tiene un cariz expiatorio de enorme belleza, con variedad temaria.