Sátira sobre un grupo de personas solitarias que participan en un programa social gubernamental que pone a prueba sus conductas.
El compositor aplica una creación que transita por diferentes géneros, como el drama, lo romántico, el suspense y especialmente la comedia. Lo hace con solvencia y con refinamento musical, lo que contribuye a darle categoría y prestancia al filme. Aunque cuenta con un tema principal brillante no acaba de conseguir estructurar y dar solidez al conjunto, que queda así algo disperso y sin poder elevarse sobre el resto del filme, quedando pegado a la narración según se va sucediendo y por esa razón cayendo en cierta monotonía. Aún así hay varios puntos álgidos (especialmente los sentimentales) y momentos de fortaleza.