Serie televisiva ambientada en el universo Star Wars, tras la caída del Imperio y antes de la aparición de la Primera Orden, sobre un cazarecompensas solitario en busca de un cliente.
Tratándose del primer capítulo de una serie es prematuro hacer una valoración de lo que es la banda sonora de este primer episodio sin considerar que puede tratarse (o no) de un comienzo musical a ser desarrollado, evolucionar y tomar forma. Conviene pues, quedar a la espera.
En lo que se ofrece en este primer episodio se constata que el compositor marca distancias con John Williams, lo que hace suponer que se pretende dar a esta serie una entidad y personalidad propia, alejada de la serie de filmes. Hay ciertas similitudes a la música de Creed (15), que pueden deberse a su uso como temp track o a una deliberada voluntad de aportar un tono moderno, dinámico y sobre todo empático y comercial. También hay cierto aire que se acerca al western y que se vincula al protagonista, en una atribución que, por obvia, resulta algo simple. Pero habrá que atender a si hay algo más en futuras entregas.
En lo que resta hay más buena producción musical que buena música en sí, y aunque funciona como elemento ambiental resulta algo basta, bruta, poco sutil y en exceso artificiosa que no contribuye a dar, desde este primer capítulo, unas perspectivas que sean interesantes. Pero habrá que esperar y, en su caso, matizar.