Miniserie televisiva ambientada en el futuro, cuando el Planeta Marte es colonizado por el ser humano.
Los compositores crean una banda sonora de atmósferas y ambientes, con electrónica, en una línea que es bastante previsible. Se trata de una obra que acaba por ser en exceso monótona y estática, puesto que más allá de la virtuosidad (si la tuviera) de la experiencia sonora y etérea, la música no explica nada que no haya hecho en sus primeros minutos. Los elementos dramáticos y evocadores, que los hay (como en su canción de aires existencialistas), son considerablemente insuficientes para elevar la música a un grado mínimo de trascedendencia y significación, y quedan en un mero e infructuoso intento de darle un cariz místico.