Don Diego de la Vega, escondido tras la máscara del Zorro, regresa del exilio para vengar la muerte de su esposa, a manos del gobernador español en México, quien adoptó a su hija y la educó ocultando su origen. Pero el Zorro es un hombre ya mayor y necesita la ayuda de alguien más joven. Su sucesor será Alejandro Murrieta, quien encontrará nuevos motivos para rescatar a la bella dama.
El compositor recurre al folklore y a los tópicos hispanos como base de la banda sonora, con referencias melódicas a sus partituras anteriores y el empleo tanto de la guitarra como de palmeos, zapateos previsibles y el shakuhachi (flauta japonesa de madera), emulando las grandes creaciones para el género de los años cincuenta.