Un hombre, harto de su esposa, planea el crimen perfecto y la invita a ir al mismo hotel en el que pasaron la luna de miel. Pero allí, ella le abandona y un extraño disparo incrimina al hombre en un crimen que no ha cometido.
Partitura cuyo tema central está dotado de buenas dosis de humor negro, de tonalidad netamente británica, y que encuentra en su dinamismo la mejor manera de acompañar la película. Se incluye, junto con otras bandas sonoras, en el recopilatorio Bernardo Bonezzi. 15 años de cine (97).