Western basado en una famosa serie televisiva de los sesenta, sobre los avatares de dos jugadores de cartas que se preparan para una gran competición nacional.
El compositor sigue los patrones melódicos del género del western, aunque de manera bastante dispersa en sus distintos temas, algunos de ellos del todo tópicos, y otros dramatizados de un modo poco adecuado para lo que es, en realidad, una comedia.