A un niño sus padres le cuentan que va a tener un hermanito y que va a ser muy especial: tendrá síndome de Down.
El compositor firma una sencilla y bienintencionada creación que se empapa del espíritu de las bandas sonoras italianas para enfatizar y expandir un aura de bondad y empatía. Se destaca por su sentimental tema principal, básico y retentivo, que conoce numerosas variaciones manteniendo el mismo tono. En lo que resta y no incluye esa melodía (lo dramático, ambiental y también lo cómico) es mucho menos interesante, quita consistencia al conjunto y, resultando algo apática, queda bastante lejos de los logros alcanzados por los compositores italianos en filmes similares.