Han pasado ya veintidós años desde que la saga de MISIÓN IMPOSIBLE inició su andadura en el mundo del cine, y todavía hoy se mantiene lo suficientemente atractiva como para ser tenida en cuenta. La verdad es que me gustan todas las películas que componen la saga; cada una con sus virtudes y sus defectos, sus particularidades y su propio tono. Es muy interesante ver al agente Ethan Hunt (interpretado como siempre con mucha garra por Tom Cruise) salir airoso de los jaleos más truculentos imaginables y salvar, de paso, el mundo. Son películas espectaculares; cargadas de tensión y muchas aventuras. Films de acción y entretenimiento que poseen mucha calidad.

Todo comenzó con esta película de 1996; hoy ya una obra de culto y todo un deleite audiovisual digno, por lo menos, de revisión anual. Dirigida por el genialísimo Brian De Palma y con guión de David Koepp y Robert Towne, esta es una película llena de suspense y situaciones alucinantes una detrás de otra. De ritmo imparable y trama enigmática, esta joya brilla continuamente por su estilo visual tan sofisticado y su sublime montaje... Cuando la vi en su estreno en 1996 yo tenía nueve años, y recuerdo que no terminaba de entenderla. No obstante, me sentía profundamente atraído por ella y la veía una y otra vez. En cierto modo, me ocurría lo mismo que con las mujeres; no sabía por qué pero quería tenerlas siempre cerca... Con los años asimilé su propuesta y mis dudas se fueron despejando, pudiendo entonces disfrutar de ella en todo su esplendor. Como ya he apuntado, esta primera MISIÓN IMPOSIBLE es, desde mi punto de vista, una notable película; compleja, retorcida, inesperada. Un thriller de acción ciertamente explosivo.

Danny Elfman fue el elegido (tras sustituir a Alan Silvestri) para componer la banda sonora de este primer film, y lo cierto es que el autor se las arregló perfectamente para crear un score consistente, autónomo y con personalidad, y que sólo recurría al tema de Lalo Schifrin en instantes muy puntuales. Todo lo demás son excitantes bloques de suspense y también algunos momentos de acción realmente intensos, logrando en su conjunto una atmósfera musical muy sugestiva en la que la orquesta se funde con toda clase de efectos sonoros que consiguen producir cierta sensación de delirio, de caos. Una partitura muy del estilo del Elfman de mediados de los noventa, en la misma línea irónica que "Mars Attacks!" o "Men In Black". Quizás a algunos esta primera MISIÓN IMPOSIBLE les parezca una pieza demasiado excéntrica, sin sustancia. Desde luego, no es mi caso, pues la considero desde siempre una música muy poderosa y riquísima en matices, además de elegante. Una banda sonora singular y con carácter. Un score muy notable.