Un escritor viaja a un pueblo donde la gente se convierte en vampiros.
Banda sonora convencional pero eficiente, que sigue los códigos usuales en el cine de vampiros, con música gótica, grandilocuente e intensa, que se desarrolla en los territorios de las luces y las oscuridades, con uso de coros y también de un cierto sentido romántico. Se destaca por su tema principal.