Secuela de The Best Exotic Marigold Hotel (12), en la que dado que el popular hotel solo tiene una habitación libre, el dueño planea abrir un nuevo hotel.
Como hiciera en la anterior película, el compositor se explaya con cálidos y agradables temas ambientales con música étnica, melodías ligeras, momentos evocadores y sentimentales. No es música explicativa sino ambiental, hecha para dar colorido al filme y para gustar al espectador. Es una creación empática, con temas sencillos pero bien elaborados, sin mayores pretensiones.