Una mujer no tiene razones para ser feliz, pero lo es. Un hombre no tiene razones para ser infeliz, pero lo es. Ambos se conocen y se produce un inesperado flechazo.
Agradable partitura en la línea melódica característica del compositor, con un delicioso tema principal del que ejecuta algunas variaciones y música romántica. Se incluyen canciones francesas de época.