Cortometraje ambientado en el Texas de 1862, sobre un niño hijo de granjero que celebra el regreso de su admirado tío, sin prever las trágicas consecuencias de ello.
Partitura dramática en la que el compositor aplica una música sobria e introspectiva, para resaltar una permanente sensación de dolor y vacío, solo aliviada por momentos melódicos más abiertos.