La odisea de dos niños judíos que huyen de los nazis en la Francia ocupada.
Banda sonora en la que el compositor emprende el viaje junto a los dos hermanos, relatando con la música aquello que experimentan y sienten, a medida que se suceden los acontecimientos. Es una creación que sustancialmente funciona de modo inmediato, no trasciende fuera de lo narrado salvo en el empleo del bello tema principal, que es el que se posiciona de modo externo y sirve para conectar al espectador con el filme. En lo que resta, la música es cambiante y variada: drama, miedo, ilusión, fragilidad y dignidad se van alternando pero también fusionando. Hay momentos íntimos y otros vibrantes y expansivos; temas hirientes y otros vitales y luminosos. En su conjunto, un recorrido por una amplia gama de emociones con influencias hebreas en la música y gran prestancia.