James Bond se alía con agentes nipones para detener a un malvado personaje que planea la destrucción del mundo provocando la guerra nuclear.
En esta cuarta colaboración del compositor en la serie de películas de James Bond, el tono genérico de la música es gentil. Las influencias niponas en las melodías vienen marcadas por la ubicación del argumento. La canción central es cantada por Nancy Sinatra y conoce quizás excesivas versiones instrumentales a lo largo del metraje.