Una artista con problemas está siendo azotada por una serie de recuerdos que se confunden con sueños violentos.
Muy interesante creación que evoca en buena medida las músicas de las películas Giallo. Es una partitura electrónica y acústica que hace un notable empleo de coros no solo para generar un ambiente críptico y de horror, sino para resaltar el caos y el desconcierto psicológico y emocional, con un tono moderadamente demencial pero también intensamente dramático en varios de sus momentos. Es variada en temas y muy sólida en su conjunto.