Un trío de estudiantes se unen para investigar el mítico tesoro de su pequeño pueblo, pero descubren una maldición de Halloween.
"Los directores y yo nos propusimos crear una partitura orquestal clásica que recordara a las películas de aventuras y familiares de los años 80 y 90, con un fuerte enfoque en melodías memorables y coloridas orquestaciones. Queríamos que la partitura evocara la emoción y el asombro de estos niños mientras se embarcan en la aventura de su vida, resolviendo el misterio oculto en Carterville. La música gira en torno a varios temas centrales. Mi objetivo era crear una partitura que evocara la nostalgia de las bandas sonoras clásicas de los grandes éxitos de Hollywood, con un sonido orquestal rico y pleno. Tuvimos la suerte de contar con la prestigiosa Orquesta Sinfónica de Bratislava, compuesta por 90 músicos, para dar vida a esta visión" (Robin Hoffmann)