Filme basado en hechos reales sobre una periodista que denunció las mafias irlandesas y sería asesinada por ellos.
Banda sonora dramática que se apoya mayoritariamente en violines y piano, en un par de canciones de Sidnear O'Connor y en una música de aire irlandés. El compositor emplea orquesta y sintetizadores para aderezar un tono de peligro y fatalidad anunciada, pero también de valentía y dignidad de la protagonista.