Un carpintero de 59 años se ve obligado a acudir a la asistencia social. Sin embargo, a pesar de que el médico le ha prohibido trabajar, la administración le obliga a buscar un empleo si no desea recibir una sanción.
La escasa música original del filme es sustancialmente música para crear un entorno de moderada desolación e incluso desconcierto, vacío y pesadumbre, con austeridad en sus temas.