Si hay una parte en toda la serie donde la música de Miyagi-Do destaca, es en la del final del capítulo 6, con dos escenas que se encuentran en Miyagi’s Room y All of Us.
Para superar la humillación y la derrota que le propinó Terry Silver en el anterior capítulo, la familia LaRusso, junto a Chozen, Johnny y todos los estudiantes de Miyagi-Do sorprenden a Daniel en el dojo para poder así mostrarles su apoyo incondicional y así poder ganar la guerra de dojos en el Valle. Inicia este plan de rehabilitación su mujer Amanda, que lleva a Daniel a la habitación del señor Miyagi-san para así poder sanar las heridas y volver a creer en la filosofía del kárate de su antiguo senséi. Este momento íntimo destaca por el uso de melodías con reminiscencias a la música de Bill Conti para la película original de Karate Kid (84) y el empleo de instrumentos de viento madera orientales y unas cuerdas con tonalidades nostálgicas y dignas de la madurez a la que ha llegado el personaje de Daniel LaRusso. Allí, el protagonista es sorprendido por Robby, su primer ex-alumno del nuevo Miyagi-Do, con quién aún no se había reunido después del arco de villano que tuvo en la anterior temporada en Cobra Kai. Musicalmente, el reencuentro y la disculpa de ambos se representa con una variación algo más tranquila y desarrollada de la música que les unió al inicio de la segunda temporada, cuando Daniel y Robby empezaron a reconstruir el dojo, que es una parte de la melodía completa del tema de Miyagi-Do.
Finalmente, cuando Daniel LaRusso es incitado a salir al exterior por su hija Sam, este se encuentra con que absolutamente todos los estudiantes de Miyagi-Do, su mujer e hijos, su ex-rival Johnny Lawrence y su también ex-rival Chozen Toguchi están allí para mostrarle su apoyo. A partir del minuto 0:56 de All of Us, percusión; cuerdas, instrumentos de viento madera y coros inician de manera in crescendo el tema principal del dojo en una de las variaciones más impresionantes del tema que ha habido en toda la serie. Además, no hay efectos de sonido ni diálogos que interrumpan el curso de la música en la escena y durante casi un minuto completo podemos escuchar el tema de Miyagi-Do en todo su esplendor, no solo en su vertiente filosófica sino también en el tema de las técnicas (personalmente, uno de mis favoritos), que aparece al final de todo el tema, con una presencia impresionante de las trompas y la adición de las guitarras eléctricas mientras sale el logo de la serie al final del capítulo.
Este es un tema que ha ido apareciendo brevemente y de manera azucarada en anteriores entregas, especialmente en la primera temporada, en la que el tema se empleaba para la relación amorosa entre Miguel Diaz y ella. Era muy meloso e incluso infantil, tal y como llevaban la relación ambos personajes. A lo largo de las temporadas, el tema se ha ido posicionando más hacia un tema de personaje y no el tema de amor de la serie: Sam maduraba y ya no tan solo era la pareja de Miguel sino que era una persona importantísima en la trama y una de las heroínas más fuertes de la serie. Sin embargo, el tema de Sam se sigue relacionando también con el amor de Miguel y se emplea en las escenas románticas de ambos.
En esta quinta temporada, los dos maduran como personas y con ello, madura también la relación, que es llevada a dos puntos esenciales: una segunda ruptura (en el capítulo 3) debido a que Sam necesita tiempo para encontrarse a sí misma y una vuelta a la relación, en el final de temporada, donde ambos se dicen por primera vez Te quiero. El tema romántico, que anteriormente se basaba mucho en las guitarras, sintetizadores y tonalidades algo más azucaradas, ahora destaca por su uso más relajado y serio de las cuerdas y un tempo mucho más lento que de costumbre, aún con presencia de las guitarras y algo de percusión.
Como hemos comentado, Sam ya no es simplemente la pareja de Miguel sino que es una extraordinaria luchadora digna de ser la hija de Daniel LaRusso, con un kárate que roza la perfección no sólo del estilo de su padre sino también del de Johnny Lawrence. Y durante esta temporada su mayor reto será encontrarse a sí misma… y con ello, el tema de Sam también hallará su lugar durante los distintos capítulos de esta quinta temporada. Ya han habido diversas variaciones del tema durante la serie (algunas melosas, otras heroicas…) pero es en el octavo capítulo de esta temporada donde Sam finalmente encuentra el apoyo de toda su familia, además de la de Miguel, Johnny, Chozen, Robby, Hawk y el resto de Miyagi-Do. Esto ocurre primeramente en el entrenamiento antes de la preselección para el Sekai Taikai (uno de los mayores torneos de kárate del mundo), cuando Chozen y su padre le animan a luchar por ella misma: aquí, la melodía del tema de personaje de Sam se extiende algo más pues el arco del personaje también está evolucionando. Es una lástima que esta música no esté en la banda sonora pues creo que es una de las variaciones más descriptivas de la psicología del personaje y de cómo ésta se libera de la tensión que lleva en su interior durante la serie.
Durante su combate para la preselección del Sekai Taikai, Sam lucha contra Devon (ex-alumna de Johnny Lawrence y nueva aprendiz de Tory) en una increíble escena de combate donde la música inicia estando de parte del dojo de Cobra Kai pues, de nuevo, el arbitro ha sido comprado por Terry Silver y está en contra de los puntos que realiza Sam en el combate. No es hasta que esta se dirige a pedir consejo a los suyos que la música empieza a estar de parte de Sam, ya que todos confían en que es la mejor luchadora y le aconsejan que golpee a su oponente de manera clara hacia los jueces para que así sus puntos estén asegurados.
El combate de Sam contra Devon posee una de las mejores variaciones del tema de personaje de Sam de toda la serie pues esta está confiada en ganar por ella misma y por los suyos y la música no duda en acompañarla durante todo el enfrentamiento. Ésto no ocurrió, por ejemplo, en el combate del torneo de la anterior temporada contra Tory pues ambas podían ganar el duelo en cualquier momento y la música estaba tanto de parte de Sam como de su oponente. Muchísima percusión, potentes y grandilocuentes vientos metales, algún que otro instrumento exótico y varios ostinato de cuerda in crescendo realzan la épica de la preparación, la realización y la victoria del combate ante su rival de Cobra Kai en el gran tema del segundo CD de la banda sonora: The Better Fighter, un tema dedicado a Sam LaRusso.