Clásico del cine francés sobre el mágico relato del amor desbordado de una bestia enclaustrada tras una maldición en su palacio y una joven y hermosa campesina.
Ópera que el compositor escribió para ser aplicada, en representaciones en directo, en la película La Belle et la bête (46). Con orquesta de cámara, barítonos, soprano y mezzosoprano y fiel al estilo tan reconocible del compositor no resiste comparación alguna con la mágica creación que escribiera para el filme Georges Auric.