Un tímido profesor de historia es raptado por un grupo de forajidos, liderado por un singular bandido
En este western italiano con abundante sarcasmo y dosis de humor, el compositor pone en práctica varios de los preceptos que aplicó en el género, en películas no dirigidas por Sergio Leone. En primer lugar, un carácter agresivo de la música que resalta lo grotesco y decadente de los personajes; en segundo lugar, la recreación de una atmósfera lírica (con la aportación de la voz soprano de Edda Dell'Orso), con la que se contrasta lo anterior; en tercer lugar, el poder de evocación de melodías aderezadas con instrumentos como la guitarra, la percusión, etc.