Odisea de uno de los grandes mitos de la España medieval en una superproducción rodada en tierras españolas.
Una de las grandes partituras del compostitor, tan épica y romántica como solemne y rigurosa. Para su creación, el compositor viajó a España y contactó con el venerable historiador Don Ramón Menéndez Pidal, autoridad mundialmente reconocida sobre El Cid Campeador y sus tiempos. Menéndez Pidal le mostró las "Cantigas de Santa María", una colección de más de 400 canciones religiosas recopiladas por Alfonso X el Sabio. Las estudió en profundidad y extrajo de las mismas los fragmentos melódicos que le sirvieron como punto de arranque. Otorgó luego a la partitura una tonalidad épica, para resaltar el carácter heroico del personaje protagonista y añadió además un tema de amor de extrema nobleza para describir la relación de éste con su esposa Jimena. Se acompaña de Double Indemnity (44)