Serie televisia sobre nueve personas que asisten a un retiro donde se les prepara para una transformación total de mente y cuerpo.
Los compositores aplican una banda sonora poco relevante, insustancial y errática que acaba difuminándose en todos sus propósitos, tanto en la pretensión de recrear un entorno ficticiamente idílico, controlado, como en las partes para el suspense y el misterio, y siendo aún peor en la vertiente dramática. La música no dice nada, no hace nada y no establece nada principalmente por su falta de consistencia temática, estructural y por su inexistente evolución. No genera ambiente ni suspense.