Secuela de Psycho (60), en la que Norman Bates, rehabilitado para la sociedad, vuelve a su motel. Pero hay alguien que quiere vengarse de él.
Partitura en la que el compositor no referenció la obra previa de Bernard Herrmann, y sustentó su creación en la ambientación sonora del terror con música electrónica y orquestal. Escribió un tema nostálgico y afligido aplicado al personaje de Norman Bates como referente de su anhelo de redención, y sobre él ejecutó algunas variaciones, junto a temas para el entorno, hostiles.